Las milicias prorrusas de la ciudad de Slaviansk (sureste de Ucrania) han liberado a dos de los tres oficiales del Servicio de Seguridad de Ucrania a los que tenían secuestrados.

"Hemos logrado acordar con la otra parte el intercambio de dos de estos soldados de unidades especiales a cambio de nuestros partidarios. Después los hemos liberado" dijo un portavoz de las "fuerzas de autodefensa" prorrusas a la agencia Interfax.

La fuente aseguró que los liberados se han comprometido a no participar en ninguna operación militar en el sureste de Ucrania.

Los oficiales ucranianos secuestrados el día 26 fueron identificados como el teniente coronel Rostislav Kiyashko, el mayor Serguéi Potemski y el capitán Yevgueni Varinski.

Al día siguiente, fueron exhibidos ante las cámaras de televisión con los ojos vendados, descalzos y en calzoncillos y camiseta.

Poco antes del anuncio de la liberación de dos de ellos, el autoproclamado alcalde de Slaviansk, Viacheslav Ponomariov, dijo a la agencia rusa Interfax que habían comenzado negociaciones con las autoridades de Kiev para la liberación de los seis inspectores militares europeos y un intérprete retenidos desde el 25 de abril.

"Esos representantes de la OSCE siguen en Slaviansk. Hemos creado condiciones cómodas para ellos. Los tratamos como amigos. Por supuesto, quieren irse a su casa y ya estamos teniendo negociaciones con las autoridades de Kiev. Esperamos que pueda haber un intercambio entre ellos y nuestros activistas detenidos", señaló el "alcalde".

Ponomariov agregó también iban a tratar intercambiar a los tres soldados ucranianos de los grupos especiales Alfa también retenidos en Slaviansk,

El secretario general de la OSCE, Lamberto Zanier, llegó el pasado martes a Kiev para tratar de agilizar la liberación de los inspectores militares europeos (tres alemanes, un polaco, un danés y un checo, además de un intérprete alemán) secuestrados por las milicias prorrusas tras ser acusados de espiar para la OTAN.

Los insurgentes pusieron el domingo en libertad al inspector sueco Thomas Johansson por motivos de salud, y alegando que su país no es miembro de la OTAN.