El presidente de EE UU, Barack Obama, concluyó ayer una visita de Estado a Japón durante la cual reafirmó a su aliado que Washington está comprometido con su defensa y con la de las islas que le disputa China. El lunar del viaje ha sido la incapacidad de los equipos negociadores para alcanzar un acuerdo comercial visto como crucial para un pacto más amplio.