Varias personas murieron hoy en los combates que libraron fuerzas especiales ucranianas y milicias prorrusas en el aeródromo de la ciudad de Kramatorsk, en la región oriental de Donetsk, baluarte de la sublevación contra el Gobierno de Kiev.

"Sí, hay muertos", aseguró a la agencia UNN un portavoz del Ministerio de Defensa de Ucrania que había informado previamente de una "operación especial" para liberar el aeródromo controlado por los prorrusos.

Una vez concluida esa operación, el presidente interino de Ucrania, Alexandr Turchínov, anunció que "fuerzas especiales han liberado el aeródromo de los terroristas".

Mientras, medios rusos que citan a fuentes de las milicias prorrusas de la ciudad informaron de entre cuatro y once muertos entre los sublevados.

"En el aeródromo hay cuatro muertos y dos heridos entre las milicias (prorrusas). Los combates han cesado. Las milicias se han retirado. La parte ucraniana ha tomado el aeródromo bajo su control", dijo un portavoz de los sublevados a la agencia oficial rusa RIA-Nóvosti.

El canal ruso "Rusia 24" entrevistó a un portavoz de las milicias prorrusas quien aseguró que cazas ucranianos abrieron fuego contra "civiles" que se acercaron al aeródromo para supuestamente convencer a los soldados de que se pasaran a su bando.

"Los militares abrieron fuego contra ellos. Dos minutos después dos cazas despegaron y comenzaron a disparar desde sus cañones contra los civiles a una altura de diez metros", dijo Pável Petrov, portavoz prorruso.

Al respecto, una fuente militar aseguró al diario digital "Ukrainskaya Pravda" que los cazas que estaban estacionados en el aeródromo "despegaron porque no se sabía cómo terminaría el asalto y había que protegerlas, por eso ascendieron".

El jefe de la operación antiterrorista lanzada por Kiev, el general Vasili Krútov, advirtió hoy a las milicias prorrusas de que "no habrá más ultimátum" y de que el Ejército ucraniano "combatirá a los invasores extranjeros".

"Los ultimátum son cosa de civiles. Esta es una operación militar", dijo Krútov a un grupo de reporteros entre los que se encontraba Efe cerca de la localidad de Izium, en la región de Járkov.

Krútov, general de los servicios secretos ucranianos, estimó en "unos 300 a los hombres armados que actúan en el este de Ucrania, en su mayoría en Slaviansk", ciudad de la región oriental de Donetsk, limítrofe con Rusia.

"Los vamos a combatir porque son invasores extranjeros, bandidos y terroristas", señaló el jefe del Centro Antiterrorista y subjefe del Servicio de Seguridad de Ucrania.

Turchínov anunció hoy el comienzo de una operación antiterrorista en la región de Donetsk para "defender a los ciudadanos de Ucrania, frenar el terror y los intentos de desmembrar el país".

El domingo pasado, adelantó la puesta en marcha de una "operación antiterrorista de envergadura con el empleo de las Fuerzas Armadas" para restablecer el orden en las regiones orientales de país, de mayoría rusohablante.

Un convoy de una veintena de vehículos blindados y unos 500 soldados del Ejército ucraniano ha entrado este martes en la localidad de Slaviansk, en el este de Donetsk, según han informado las agencias rusas Itar-Tass e Interfax. Previamente, la agencia Reuters había informado, citando al Servicio de Seguridad Ucraniano (SBU) de que en esta ciudad también estaba en curso una operación antiterrorista.

Según ambas agencias, el convoy militar también estaba compuesto por varios autobuses y otros vehículos. De acuerdo con Itar-Tass, que cita al alcalde en funciones de la ciudad y comandante del batallón de autodefensa, Viacheslav Ponomarov, Slaviansk estaba rodeada por fuerzas militares enviadas por Kiev.

La reacción del Kremlin

El Kremlin tachó hoy de "absurdas" las denuncias occidentales sobre la presencia de tropas rusas en el este de Ucrania, donde las milicias prorrusas se han sublevado contra el Gobierno de Kiev.

"Son declaraciones absurdas. Allí no hay tropas rusas. Ya lo han dicho el presidente y el ministro de Exteriores", aseguró Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, a las agencias rusas.

Rusia, que cuenta con varias decenas de miles de tropas en la frontera con Ucrania, según la OTAN, asegura que no planea invadir Ucrania, a la que acusa insistentemente de discriminar a los rusoparlantes residentes en el este del país.

El Kremlin ha propuesto a Kiev que apruebe una nueva Constitución que convierta a Ucrania en una federación, otorgue a la lengua rusa el estatus de oficial y reconozca a la república autónoma ucraniana de Crimea, anexionada por Moscú, como parte del territorio ruso.