El Gobierno de Estados Unidos negó este jueves cualquier responsabilidad en el incidente ocurrido con el avión del presidente boliviano, Evo Morales, y volvió a insistir en que Edward Snowden está "acusado de filtrar información clasificada" y, por tanto, debe regresar al país.

El presidente de EEUU, Barack Obama, ya está de regreso en Washington tras su gira africana, pero ni él ni su secretario de Estado, John Kerry, hicieron este miércoles declaraciones sobre el caso de Snowden ni sobre el incidente con el avión de Morales.

Ese avión, que retornaba el martes de Rusia a Bolivia, no pudo sobrevolar o aterrizar en algunos países europeos por la sospecha de que a bordo iba Snowden, el exanalista de la CIA y la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de EEUU reclamado por Washington por espionaje.

Morales estuvo varado casi 14 horas en Viena porque, según denunció, Francia, Italia, España y Portugal impidieron que sobrevolara su espacio aéreo o aterrizara en su territorio en su retorno a Bolivia.

"Las decisiones (de bloquear el paso de Morales) fueron tomadas por países individuales y deberían preguntarles a ellos por qué toman esas decisiones", afirmó al respecto Jen Psaki, la portavoz del Departamento de Estado de EEUU, en su rueda de prensa diaria.

Psaki eludió precisar si Washington habló con esos países por la sospecha de que Snowden iba en ese vuelo.

"En los últimos diez días hemos estado en contacto con un amplio número de países con posibilidades de que Snowden aterrizase o transitase a través de ellos", se limitó a decir la portavoz.

Del mismo modo, Psaki esquivó la pregunta de si Washington pidió a las autoridades austríacas que inspeccionasen el avión presidencial en Viena por si se encontraba Snowden.

"De nuevo, les refiero a todos esos países para que describan qué ocurrió y por qué se tomaron determinadas decisiones", comentó la portavoz.

Además, insistió en que Snowden, de 30 años, "ha sido acusado de filtrar información clasificada y de tres cargos criminales, por lo que debe regresar a Estados Unidos".

Snowden está acusado de espionaje por Washington por haber filtrado a dos diarios la vigilancia realizada por la NSA estadounidense a los registros telefónicos y datos de internet de millones de sus ciudadanos para espiar contactos en el exterior de sospechosos de terrorismo.

Las últimas revelaciones de Snowden han sacado a la luz que EEUU también espió a la Unión Europea (UE), -fundamentalmente a Alemania-, la ONU y 38 embajadas de países como Japón y México.

Este miércoles Obama habló por teléfono con la canciller alemana, Angela Merkel, y ambos acordaron celebrar una reunión de alto nivel entre sus dos países para abordar "en detalle" el espionaje de Washington a la Unión Europea (UE) y en particular a Alemania, según informó la Casa Blanca.

Obama aseguró a Merkel que toma "muy en serio las preocupaciones" de sus aliados y socios europeos sobre ese espionaje.

Los dos líderes reafirmaron la importancia de mantener "una estrecha cooperación" entre sus respectivos servicios de inteligencia "en la lucha contra el terrorismo y otras amenazas a la seguridad" de EEUU, Alemania y otros países aliados.

Mientras, Snowden permanece en la zona de tránsito del aeropuerto moscovita de Sheremétievo, según dijo hoy a la agencia Interfax una fuente de los servicios aeroportuarios.

El joven, que ha pedido asilo a una veintena de países, renunció a la posibilidad de asilo en Rusia después de que el presidente ruso, Vladímir Putin, le pusiera como condición para permanecer en el país cesar todas las actividades contra Estados Unidos.

Los países a los que ha pedido asilo Snowden deberían "considerar su solicitud de una forma justa y proteger sus derechos en virtud del derecho internacional", enfatizó este miércoles en un comunicado la organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW).

El derecho internacional "reconoce que la revelación de secretos oficiales a veces se justifica en el interés público" y, según HRW, "puede ser necesaria" para exponer "graves violaciones de derechos humanos".