La Presidencia rusa tachó ayer de "lamentables" las labores de captación para la CIA llevadas a cabo por un empleado de la Embajada de EE UU en Moscú y advirtió de que este tipo de incidentes suponen un impedimento a la mejora de las relaciones entre los dos países.

El Kremlin reaccionó con sorpresa a la actividad desplegada por la CIA en Rusia. "Por decirlo de una manera suave, causa sorpresa el hecho de que el burdo intento de reclutamiento tuviera lugar después de que los presidentes Obama y Putin dejaran clara la importancia de activar la cooperación entre los servicios secretos de ambos países", dijo Yuri Ushakov, consejero del líder ruso. El Ministerio ruso de Exteriores presentó una nota de protesta al embajador, después de la detención de un diplomático estadounidense acusado de espionaje.

El Servicio Federal de Seguridad de Rusia anunció el martes el arresto del tercer secretario del departamento político en la embajada de EE UU "cuando intentaba reclutar a un miembro de los servicios secretos rusos".