El rey de Marruecos, Mohamed VI, ha impedido en el último momento que el segundo partido más importante de la coalición de gobierno, el nacionalista Istiqlal (PI), abandonara el Ejecutivo, lo que podría haber sumido al país en una grave crisis política, según informó ayer la agencia de noticias marroquí "MAP".

El sábado, el consejo nacional del partido anunció que se retiraba del Gobierno por el fracaso de éste en reforzar la economía y resolver los graves problemas sociales del país.

Según MAP, tras conocer la decisión del Istiqlal, el rey marroquí se puso en contacto con su secretario general, Hamid Chabat, y lo exhortó a mantener en el Gobierno a los ministros del PI, que ostentan, entre otras, las carteras de Educación y Economía, a fin de preservar el normal funcionamiento del Ejecutivo.

Después de que Chabat conversara con Mohamed VI, el PI publicó en un comunicado que se adhería "totalmente a la voluntad real de garantizar las condiciones de estabilidad y de servir a los intereses superiores de la Nación".