El presidente ruso, Vladimir Putin, promulgó ayer una ley que prohíbe a los miembros del Gobierno tener cuentas o valores en bancos extranjeros, medida que se enmarca en la lucha contra la corrupción en la Administración pública. Reclamó al Gobierno mayor eficacia y le dio un mes para que le presenten planes de trabajo, que se harán públicos.