El expresidente de Pakistán y general retirado Pervez Musharraf llegó hoy al aeropuerto internacional de la ciudad meridional paquistaní de Karachi procedente de Dubái, para participar en las próximas elecciones generales del 11 de mayo.

"Estoy emocionado por estar de vuelta en casa. ¡Primero Pakistán!", afirmó el exmandatario a su llegada a Karachi, tras cuatro años de exilio voluntario en Londres y Dubái, según su cuenta oficial de la red social Twitter.

El también exjefe del Ejército de Pakistán aterrizó en el aeropuerto Quaid e Azam hacia las 12.20 hora local (7.20 GMT) en un vuelo de la aerolínea Emirates, donde esperaban su llegada miles de personas.

Un miembro del partido de Musharraf, la Liga Musulmana de Todo Pakistán (APML), había asegurado a Efe horas antes de aterrizar el exmandatario en Karachi que éste sería recibido en el aeropuerto por "unos 100.000 seguidores".

"Le esperan para darle una gran recepción" pues el fundador del APML es "muy importante" para el devenir del partido, dijo Rashid Qureshi, que fue portavoz presidencial de Musharraf y ahora es el secretario general del APML para la provincia de Sindh, cuya capital es Karachi.

En un principio, la agenda de Musharraf para hoy incluía la visita al mausoleo del padre de la nación, Mohamed Alí Jinnah -conocido en Pakistán como Quaid e Azam (el Gran Líder)- para rendirle homenaje y dar un mitin ante "miles de personas".

Sin embargo, Qureshi afirmó que por motivos de seguridad tuvieron que cancelar esa visita, por lo que finalmente los seguidores que iban a acompañar a Musharraf en el mausoleo se trasladaron al aeropuerto para "apoyarle".

En su primera intervención en público ante sus seguidores -y tras reunirse con la plana mayor del APML-, Musharraf sentenció que su formación "salvará" el país y que llevará la "paz" a la conflictiva ciudad de Karachi, la más violenta de Pakistán.

En el discurso, que fue retransmitido en directo y que duró unos 5 minutos, el exmandatario agradeció el recibimiento y aseguró que, a pesar de las amenazas de los talibanes, no siente ningún miedo por su vida, pues al único al que teme es a Alá.

El general retirado se refería a las declaraciones hechas ayer por un portavoz del movimiento talibán paquistaní (TTP), Ehsanulá Ehsan, que había asegurado al medio local Dawn que disponen de un escuadrón que se inmolará con explosivos frente a Musharraf.

"Estamos entrenando a atacantes suicidas con el objetivo de asesinar" al expresidente, había señalado Ehsan.

Pero Musharraf finalmente desoyó esas amenazas y con su llegada el APML, que participará en los comicios parlamentarios y presentará candidatos en todos los distritos, espera obtener el impulso que necesita para dar la campanada en las elecciones de mayo.

Sin embargo, el analista Humayún Khan -de la Universidad Nacional de Defensa de Islamabad- afirmó a Efe que a pesar de las altas pretensiones políticas que tiene Musharraf y su APML, la formación no conseguirá "más de un asiento en el Parlamento".

"El regreso de Musharraf tendrá impacto durante los días inmediatos a su llegada debido a la cobertura que harán los medios de comunicación, pero el impacto político será muy limitado, pues el apoyo que tiene (entre los electores) es muy escaso", aseguró Khan.

Musharraf, que llegó al poder en Pakistán en 1999 tras un golpe de Estado y abandonó el cargo en 2008 para evitar un proceso de impugnación parlamentaria en su contra, ha vivido desde su dimisión entre Londres y Dubái.

La justicia paquistaní dictó en 2011 varias órdenes de arresto contra Musharraf por no haber protegido la vida de la ex primera ministra Benazir Bhuto, asesinada en un atentado en diciembre de 2007, cuando el militar era presidente.

Sin embargo, el viernes un tribunal de la provincia de Sindh allanó el camino al regreso de Musharraf al país asiático al garantizarle la libertad bajo fianza a su regreso.

La organización estadounidense Human Rights Watch (HRW) expresó a través de un comunicado su consternación ante la posibilidad de que Musharraf no sea arrestado por las violaciones a los derechos humanos que cometió cuando se hallaba en el poder.

"No se le debería permitir a Musharraf eludir los serios procesos judiciales que hay en su contra", sentenció el director de HRW en Pakistán, Alí Dayan Hasan.

El Ejecutivo paquistaní anunció el miércoles las próximas elecciones generales, las primeras en los 65 años de historia independiente del país asiático que se registran tras cumplirse el mandato completo de un gobierno civil.

Con el objetivo supervisar las próximas elecciones, la Comisión Electoral anunció hoy que el juez retirado Hazar Khan Khoso será el primer ministro del Gobierno interino en Pakistán hasta que se constituya un nuevo Ejecutivo tras las comicios del 11 de mayo.