Un italiano decidió romper el arresto domiciliario al que estaba sometido desde el pasado mes de marzo porque prefería ser encarcelado antes que tener que convivir con su mujer, según informaron los medios locales.

Los hechos sucedieron en Villabate, localidad cercana a Palermo (isla de Sicilia, sur de Italia). Después de huir, el hombre se entregó a la Policía y suplicó a los agentes que le metieran en el calabozo antes que tener que volver con su mujer.

Sin embargo, los agentes le volvieron a someter a arresto domiciliario, con lo que el hombre se vio obligado a volver a su casa, donde su esposa le echa en cara no hacer nada por el porvenir de la familia. El individuo había sido detenido el pasado mes de marzo por abandono de residuos especiales.