La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, aseguró ayer en Beirut que Estados Unidos no incluirá la soberanía de Líbano en ningún tipo de acuerdo con Siria y emplazó a los libaneses a celebrar unas elecciones “abiertas y libres” el próximo mes de junio.

“No hay nada que vayamos a hacer en modo alguno que socave la soberanía de Líbano. Estados Unidos nunca cerrará acuerdo alguno con Siria en el que venda Líbano ni al pueblo libanés”, declaró Clinton tras entrevistarse con el presidente libanés, Michel Suleiman.

“Habéis pasado por demasiado y lo único correcto es que tengáis la oportunidad de tomar vuestras propias decisiones”, agregó.

La visita de Clinton a Líbano, de apenas tres horas de duración, tuvo lugar seis semanas antes de las elecciones generales que enfrentan a las formaciones prooccidentales con un sector liderado por Hezbolá y respaldado por Siria e Irán.

“Creemos profundamente que el pueblo de Líbano debe poder elegir a sus propios representantes en unas elecciones abiertas y libres, sin el espectro de la violencia ni la intimidación y sin ninguna ingerencia externa”, declaró.

“Seguiremos apoyando a las voces moderadas en Líbano y a las instituciones responsables oficiales que están trabajando duro para construir el Estado libanés”, agregó.

Clinton no quiso especular sobre el resultado de los comicios, pero destacó que “la moderación es importante en las cuestiones de Estado”.

En la tumbra de Hariri

Durante su visita, Clinton visitó la tumba del ex primer ministro Rafik Hariri en el centro de Beirut y se entrevistó con su hijo y líder de la coalición prooccidental, Saad Hariri.

El asesinato de Rafik Hariri en 2005 provocó la salida de las tropas sirias del país, lo que posibilitó la caída del régimen cliente sirio en Líbano y la ofensiva israelí contra Hezbolá del año siguiente.