Los fondos, equivalentes a 485 millones de euros, se distribuirán en programas de educación y desarrollo rural, y 100 millones de euros de ellos serán aportados por el Banco de Inversión Europeo para energía renovable, explicó la comisaria en rueda de prensa.

"Es muy importante apoyar en este momento a Pakistán, que acaba de elegir un gobierno democrático" y tiene ante sí "el enorme reto" de luchar contra el terrorismo, el extremismo y el radicalismo, que es "el enemigo de todos nosotros", apuntó Ferrero-Waldner.

A la vez, Arabia Saudí comprometió en la conferencia una asistencia de 700 millones de dólares a Pakistán para los próximos dos años, mientras Japón y EEUU ofrecieron 1.000 millones de dólares cada uno para el mismo período de tiempo, con lo que la cifra alcanzada hasta el momento es de 3.340 millones de dólares.

Ferrero-Waldner se mostró confiada en que la conferencia de donantes, que se clausura a las 18.00 hora local (9.00 GMT), logrará "probablemente" compromisos por unos 4.000 millones de dólares para Pakistán, como había apuntado el Gobierno de Japón, que auspicia el encuentro junto al Banco Mundial (BM).

La comisaria de Relaciones Exteriores de la Unión Europea señaló, no obstante, que lo importante en este caso no es el dinero, sino "que se lleven a cabo los programas y que las cosas se hagan".

Ferrero-Waldner recordó que Pakistán cuenta con un elevadísimo nivel de analfabetismo entre sus 170 millones de habitantes y que el 70 por ciento de ellos viven apenas con dos dólares al día, por lo que "lo más importante es lograr reducir la pobreza" para así poder luchar contra el extremismo.

En este sentido, afirmó que en la conferencia de donantes de Tokio ha habido un ambiente "excelente" y también un "cambio de estilo y de contenido" en nuevo Gobierno de EEUU, representado por Richard Hoolbroke, enviado especial para Pakistán y Afganistán.

"No están hablando sólo de dedicar el dinero a seguridad, sino también al desarrollo, nosotros (la UE) lo llevamos haciendo mucho tiempo", apuntó la comisaria, para quien es preciso también esperar un compromiso por parte de Pakistán a favor del buen gobierno y la democracia.

La UE es el mayor socio comercial de Pakistán, con un intercambio anual de unos 7.000 millones de dólares, explicó la comisaria europea, que lamentó la ausencia de la India de la conferencia de donantes de Tokio, en la que sí están países como Irán, EEUU, China, Corea del Sur o Arabia Saudí.

Japón y el Banco Mundial (BM), que han impulsado esta cumbre de donantes, creen que se podrían conseguir alrededor de 4.000 millones dólares para estabilizar el Gobierno paquistaní y continuar con las reformas económicas en el país musulmán.