El capitán del barco “Maersk Alabam”, el estadounidense Richard Phillips, que se encontraba retenido desde el pasado miércoles por un grupo de piratas somalíes, fue liberado ayer tras una operación de rescate efectuada por la fuerza de intervención especial de la Armada, los SEALs, que se habría cobrado la vida de tres de sus cuatro secuestradores. El capitán norteamericano se encontraba ayer por la tarde, tras ser liberado sano y salvo, a bordo del buque estadounidense “USS Bainbridge”, según aseguraron fuentes oficiales a la cadena CNN. El cuarto de sus secuestradores se encuentra bajo custodia.

Desde el pasado sábado había un destacamento de la Marina estadounidense intentando acercarse al lugar en el que estaba retenido. Los piratas habían repelido el ataque de la Marina, aunque finalmente ésta logró su objetivo. Según la CNN, la Marina, que tiene varios buques de guerra en el área, envió una pequeña delegación de soldados en un bote como primer acercamiento.

Los piratas se encontraban a sólo unos 30 kilómetros de la costa de Somalia y EE UU quería impedir a toda costa que llegaran a tierra, lo que podría haber dificultado aún más las labores de rescate.

Phillips, de 53 años, se ofreció como rehén de forma voluntaria el miércoles para garantizar la seguridad de los 20 miembros de su tripulación después de que cuatro piratas armados abordaran su barco.

El “Maersk Alabama”, que llegó ayer a Mombasa con los 19 marineros y un cargamento de contenedores de comida del Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas que transportaba. Los captores pedían 1,5 millones de euros por la liberación del capitán.

“Entusiasmados”

“Estamos todos completamente entusiasmados por saber que Richard está a salvo y que se reunirá con su familia”, dijo John Reinhart, jefe ejecutivo de Maersk Line en un comunicado.

Phillips es el primer ciudadano estadounidense secuestrado por las bandas de piratas somalíes que atacan a los barcos que navegan en el Océano Índico.

Mientras, los piratas somalíes trasladaron ayer hasta las costas de Somalia al remolcador italiano secuestrado el sábado con 16 personas a bordo, todas ellas extranjeras, y de momento no se ha pedido ningún rescate por su liberación, según las autoridades marítimas regionales. “Ha alcanzado la costa, pero no sabemos dónde”, declaró Andrew Mwangura, de la Asociación de Observación Marítima del Este de Africa.