Las manifestaciones organizadas en torno a la cumbre del G-20 bajaron ayer de intensidad y se desarrollaron sin incidentes de importancia. Tras los disturbios del miércoles, cuando se produjeron varios enfrentamientos entre la Policía y algunos de los participantes, las manifestaciones de ayer se desarrollaron en un clima de normalidad. En el centro de la ciudad no hubo tampoco altercados, según un portavoz de Scotland Yard, lo que contrastó con los disturbios del día anterior, cuando el corazón financiero de Londres se convirtió en casi un campo de batalla, que dejó varios contusionados y 109 detenidos.
Por otra parte, la persona que falleció en la City de Londres durante las protestas era un hombre de 47 años que no participaba en las manifestaciones y que se dirigía a su casa tras finalizar su jornada de trabajo. Ian Tomlinson, que trabajaba en un quiosco, falleció a consecuencia de las heridas recibidas.
