Según explicó una fuente de seguridad paquistaní al 'Journal', Shah también implicó a otros miembros del grupo y confirmó la confesión realizada previamente por Ajmal Kasab, el único terrorista capturado en Bombay, a los investigadores indios, de que los diez terroristas que participaron en los atentados fueron entrenados en la Cachemira paquistaní y después fueron en barco hasta Bombay.

Además, el diario indicó que los investigadores paquistaníes han comenzado a encontrar vínculos significativos entre el LeT y los diez terroristas. También cita en su artículo a una persona próxima a la investigación que afirmó que Shah admitió también que los terroristas pasaron varias semanas en Karachi, entrenándose en combate urbano para mejorar las habilidades que tendrían que usar más tarde.

"Está cantando", aseguró la fuente. Además, esa confesión está respaldada por las llamadas telefónicas interceptadas por Estados Unidos y uno de los terroristas del Hotel Taj Mahal. Esta revelación hará por otro lado que Pakistán reciba más presiones del exterior para que investigue a fondo y lleve a juicio a los implicados en los atentados.

Asimismo, otra fuente consultada por el diario estadounidense aseguró que Shah confesó haber sido uno de los cerebros de la operación y que estuvo en contacto con los terroristas durante los ataques para aconsejarles y mantenerles centrados. Shah fue capturado junto al comandante del grupo Rehman Lajvi durante una operación contra un campamento militar del LeT.