"Resistencia", reza una de las dos pancartas rosas en griego, alemán, español e inglés, que los manifestantes desplegaron en la histórica Acrópolis. "Jueves 18 de diciembre, manifestaciones en toda Europa", se lee en la segunda.

"Elegimos este monumento a la democracia, este monumento global, para proclamar nuestra resistencia a la violencia del Estado y demandar derechos en materia educativa y laboral", afirmó un manifestante, que no quiso dar su nombre, en declaraciones a Reuters Televisión. El objetivo, añadió, es "enviar un mensaje global y a toda Europa".

Las manifestaciones en Grecia, protagonizadas principalmente por estudiantes, han generado protestas similares en otros países europeos, incluida España, provocando la preocupación entre los dirigentes del continente de que pueda producirse una ola de manifestaciones generalizada.

Por otra parte, un grupo de manifestantes que reclamaban la liberación de los detenidos durante los disturbios ocuparon ayer la sede del sindicato del sector privado GSEE y colgaron pancartas contra el Gobierno del conservador Costas Karamanlis en el edificio.

Los trabajadores del sindicato del sector público ADEDY han convocado para hoy un paro de tres horas contra la política del Gobierno y la muerte del adolescente, y están previstas concentraciones para el viernes.

Los violentos disturbios de la semana pasada dejaron daños millonarios, principalmente en Atenas, pero parecen haberse calmado en los últimos días. Ahora, los estudiantes han optado por llevar a cabo sentadas.

Unos 20 estudiantes ocuparon el pasado martes la sede de la televisión estatal, interrumpiendo brevemente el telediario para mostrar pancartas en las que se podía leer "contra la violencia del Estado". Numerosas escuelas y edificios universitarios, algunos de los cuales resultaron seriamente dañados, permanecen ocupados por los estudiantes.