"No hay ninguna verdad en estas acusaciones, es todo basura", dijo una fuente militar a la agencia india IANS.

"Ni siquiera hemos recibido una queja de las Fuerzas Aéreas paquistaníes", agregó.

La ministra paquistaní de Información, Sherry Rehman, había acusado a aviones indios de violar el espacio aéreo de Pakistán anoche.

"Lo hemos confirmado. Hemos hablado con las Fuerzas Aéreas indias y han dicho que la violación no fue a propósito. No queremos ver una escalada" de tensión, afirmó Rehman, citada por el canal "Geo TV".

También un portavoz de las Fuerzas Aéreas paquistaníes, Humyun Viqar, denunció los hechos y detalló que "aviones indios entraron en el espacio aéreo de Pakistán en dos sectores diferentes y el sistema de defensa aéreo de Pakistán, de forma eficiente, les obligó a volver a su territorio".

Según recogen los medios paquistaníes, los aviones indios volaron por encima de la Cachemira paquistaní y la ciudad oriental de Lahore, situada a pocos kilómetros de la frontera india.

Desde que se produjeron los ataques terroristas de Bombay, no ha trascendido que ninguno de los Ejércitos moviera piezas para trasladarse a la frontera entre ambos países, a pesar de que la escalada de tensión verbal entre Islamabad y Nueva Delhi es palpable.

La India ha exigido la entrega de decenas de supuestos terroristas a Pakistán, que se niega a hacerlo, pero ha ofrecido su colaboración y la creación de una comisión de investigación conjunta.

Además, Pakistán ha lanzado una operación contra el Jamaat-ud-Dawa (JuD), supuesta tapadera del grupo cachemir Laskhar-e-Toiba, que, la India responsabiliza de la masacre de Bombay.

Las fuerzas de seguridad, paquistaníes han precintado las sedes del JuD por todo el país y han detenido a al menos 20 activistas, además de poner en arresto domiciliario a su líder, Hafiz Mohamed Said.