Según recoge el canal privado "Dawn", Qureshi declaró a la prensa en la ciudad oriental de Multán que los arrestados serán juzgados de acuerdo a las leyes paquistaníes aunque se demuestre su implicación en los atentados de Bombay, que causaron 188 muertos.

Qureshi reiteró así lo que el consejero de Interior paquistaní, Rehman Malik, ya había anunciado la semana pasada, cuando todavía no había detenidos.

Las fuerzas de seguridad paquistaníes llevaron a cabo hace dos días una operación contra los grupos Lashkar-e-Toiba (LeT) y Yamaat-ud-Dawa, a los que la India acusa de estar detrás de los ataques de Bombay, y detuvieron en torno a unas veinte personas, entre ellas el cabecilla del LeT, Zakiur Rehman Lakhwi.

El Ejército paquistaní confirmó ayer que las investigaciones están dirigidas por los servicios de inteligencia y que se han registrado varias detenciones en diversos puntos del país, al tiempo que agregó que las pesquisas continuarán durante los próximos días.

Fuentes del Ministerio de Interior de Pakistán reconocieron hoy que otro de los criminales cuya extradición solicita la India se encuentra bajo arresto domiciliario.

Se trata del líder del grupo terrorista Yaish-e-Mohamed, Masud Azhar, que se encuentra en la ciudad meridional de Bahawalpur, según informó "Dawn".

Una fuente de seguridad occidental había asegurado ayer a Efe que contaba con información de que el Ejército había trasladado a Azhar desde Bahawalpur a la región tribal fronteriza con Afganistán de Waziristán del Sur.