El superintendente de la Policía de la ciudad, Khasif Alam, explicó que un grupo de hombres desconocidos prendió fuego al menos "a seis camiones y nueve contenedores con suministros" para las fuerzas de la OTAN destacadas en Afganistán.

Según la fuente, los insurgentes entraron esta madrugada, en torno a las 3.00 hora local (22.00 GMT de ayer) en la terminal de Bilal, situada a unos siete kilómetros de la capital de la Provincia de la Frontera del Noroeste.

"Todavía estamos investigando lo sucedido, no sabemos aún quiénes son los responsables del ataque. No ha habido víctimas y tampoco parece que se hayan utilizado proyectiles esta vez", precisó Alam, quien agregó que el recinto contaba con el dispositivo de seguridad habitual, aunque se trata de "un lugar abierto".

Ayer, un grupo de insurgentes había asaltado ya la terminal y se había enzarzado en un tiroteo con el personal de seguridad durante casi dos horas, tras lo cual incendiaron los vehículos de la OTAN estacionados en el lugar.

Los insurgentes mataron a varios guardias, según la prensa, y prendieron fuego con proyectiles a más de un centenar de camiones, carros de combate y otro material, aunque el superintendente redujo el número de camiones destruidos a 62 y agregó que también muchos contenedores fueron incendiados.

En las últimas semanas, han aumentado los ataques contra camiones utilizados por la OTAN, que tiene en Pakistán la principal vía de acceso para sus suministros a través del paso fronterizo de Torkham, en el área tribal de Jáiber.

Los talibanes paquistaníes, agrupados bajo el paraguas de Tehrik-e-Taliban Pakistan (TTP), han amenazado con actuar contra quienes ayuden a las fuerzas de la OTAN en Afganistán y es corriente que los conductores de los camiones sufran extorsiones.

El mes pasado, Pakistán se vio obligado a suspender momentáneamente los suministros a las tropas extranjeras en Afganistán tras el secuestro de trece camiones perpetrado por los insurgentes en la principal carretera que une ambos países.