Una embarcación del Escuadrón Especial de Botes (SBS, por sus siglas en inglés) se hizo con al menos ocho naves de los Tigres del Mar. Tras destrozar dos naves y dañar una, la fuerza aérea Mi-24 abrió fuego contra las embarcaciones. La batalla naval tiene lugar tres días después de que el Ejército de Sri Lanka tomó la costa oeste de la isla, incluida la estratégica ciudad de Pooneryn, el último bastión de los Tigres de Liberación de la Tierra Tamil (LTTE), y donde tienen a secuestrados a soldados como rehenes y continúan avanzando por el norte de la isla.

La victoria dio impulso a que los aliados del presidente de Sri Lanka le pidieran realizar elecciones parlamentarias anticipadas para fortalecer su mandato.