Víctor Moro Suárez, Presidente de la Asociación de Empresarios Españoles en Cuba: "Cuba se ha convertido en un arma arrojadiza para los partidos españoles"

-¿Qué esperan realmente de la visita de José Blanco a la isla?

-Bueno, la visita de José Blanco a Cuba parte de una invitación de la Asociación de Empresarios Españoles en Cuba, que él amablemente ha aceptado. El motivo no es otro que dar apoyo, seguimiento y presencia a un colectivo español que tiene su importancia en la isla. Hay que recordar que hoy en día los empresarios españoles son los terceros proveedores de Cuba, tras Venezuela -con todo el petróleo que aporta- y China.

-¿Se puede cuantificar esa estrecha relación comercial?

-Cuba compra a España productos por valor de? Pues mira, en los ocho primeros meses del año la cifra ya va en 746 millones de dólares, que supone un crecimiento del 33% con relación al año pasado. Y en los últimos diez años Cuba compró a España productos valorados en 9.000 millones de dólares; esto quiere decir que Cuba es el tercer cliente de España en América Latina, tras México y Brasil. Y está por encima de países tan importantes como Venezuela, Argentina o Chile.

-¿Se nota menos ahí la crisis financiera internacional?

-En América la crisis se nota menos en general. Aunque va a llegar. Sí se nota la crisis sobre todo en aquellos países donde la influencia turística es mayor. Lo que pasa es que uno de los grandes consumidores turísticos del área, en la que incluyo a la República Dominicana y a México, es Canadá, y es de los países que menos está sufriendo la crisis. Pero sin duda ninguna se nota. Si se nota en España, imagínate en países como estos. Y en el caso de Cuba tienes que sumar los problemas que han generado los ciclones, que arrasaron el país. En Vigo cuando hay vientos de 120 km/h desaparece el Club de Yates; imagínate aquí con rachas de 250 km/h.

-La aparente apertura que experimenta ahora Cuba, ¿cómo la viven las empresas españolas implantadas allí? ¿Les beneficia?

-Los empresarios no entramos en el concepto del cambio. Nosotros estamos en Cuba como empresarios, y respetamos las directrices que el país y el pueblo cubano. Yo tengo empresas en China y no me preocupa si en China hay un partido único o no. A mí lo único que me preocupa allí es hacer croquetas, precocinados o vegetales y mandarlos a diferentes países del mundo.

-Pero, ¿no cree que haya empresas posicionándose a la espera de un verdadero cambio político en Cuba para acceder al mercado?

-Nos alegra que cada vez haya más empresas interesadas en entrar en Cuba. Eso significa que el país avanza y genera buenas expectativas para el empresario. Sin duda es un país importante estratégicamente, a 90 kilómetros de Estados Unidos y a 60 de la Península de Yucatán. ¡Qué mejor situación que Cuba, en medio del Caribe! Es un país que tiene más de 1.200 kilómetros de largo, aunque la gente cree que es como la isla de Toralla. Pues no. Y viven 11 millones de habitantes, como en Portugal.

-¿Se le da a Cuba la importancia que tiene desde el Gobierno español?

-La visita de Pepe Blanco es un tema importante, porque es un espaldarazo para el empresario español. Lo importante es que Cuba se tenga presente. Por desgracia, Cuba se ha convertido en un arma arrojadiza entre partidos en España, y es un absurdo, porque es una continuación de España. Ven bien que se invierta en China y no ven bien que se haga en Cuba. Y no sé por qué. A veces parece que los lazos de sangre, en vez de unir, separan. Y olvidamos toda la sangre que une a ambas partes. Y verás lo que ocurrirá aquí cuando se puedan hacer españoles los nietos de españoles. Aquí habrá 300.000 que lo pedirán. En China creo que no hay ninguno.

-¿Hay algún tipo de empresa o sector con mayores oportunidades ahora que antes para instalarse en Cuba?

-Creo que no. Las empresas serias que vengan aquí con potencialidades, con know-how y con su propia financiación, pueden hacer cualquier cosa.