unque la grave crisis económica que vive Estados Unidos ha desplazado de los focos de atención en la campaña electoral otros asuntos pendientes como la educación, la sanidad o la reforma migratoria, els futuro presidente que salga de las urnas el 4 de noviembre deberá tomarse muy en serio algunos de los problemas crónicos que asolan a este país, como la existencia de 45 millones de personas sin cobertura sanitaria o las altas tasas de abandono escolar.

Uno de los mayores dramas de Estados Unidos es la falta de cobertura médica de millones de personas, un país donde cada día se multiplican los casos de familias que van a la bancarrota al no poder pagar los elevados costes de las facturas médicas. El candidato demócrata, Barack Obama, propone destinar una partida extraordinaria de recursos para que todo americano tenga una cobertura médica "asequible y de calidad".

Subsidios

Uno de los mecanismos será la concesión de subsidios, calculados en proporción a los ingresos, para acceder a la cobertura pública o a un seguro privado. El plan obligará a las empresas a aportar un porcentaje de la nómina del trabajador para costear el plan nacional de salud, garantizará que todos los niños tengan seguro médico, luchará para que las aseguradoras no se aprovechen de los clientes y prohibirá a las empresas farmacéuticas bloquear el ingreso de genéricos en el mercado.

El aspirante republicano, John McCain, también reconoce el problema sanitario que sufre el país, y por ello propone deducciones fiscales de 2.500 dólares por persona y 5.000 por familia, que los empleados puedan acceder a la cobertura médica a través de su empresa, fomentar la competencia entre las aseguradoras y poner en marcha el Plan de Acceso Garantizado para hacer frente al problema de las personas a las que se les ha negado el seguro médico.

Respecto a la educación, la reforma que propone Obama plantea duplicar los recursos para los colegios públicos que son administrados por empresas privadas, mejorar los salarios de los profesores, invertir más en escuelas de cero a cinco años y multiplicar las becas de acceso a la universidad.

McCain, por su parte, plantea en su programa ofrecer a las familias un bono para que puedan elegir escuela, atajar el problema del abandono y dar incentivos a los maestros.