El ataque tuvo lugar esta madrugada, cuando al menos cuatro misiles impactaron en la "madrasa" (escuela coránica) de Jalil Wazir, situada en el pueblo de Zeralita, en la demarcación tribal noroccidental de Azam Warsak.

Aunque se desconoce la procedencia exacta de los misiles, varios testigos dijeron haber visto "aviones espía" sobrevolando el área en el momento del ataque.

Las fuerzas de seguridad han iniciado ya una investigación, según aseguraron unos funcionarios políticos citados por Geo.

El pasado 14 de mayo, otras 13 personas murieron en un ataque similar registrado en la región tribal de Bajaur, que destruyó una vivienda, una mezquita adyacente y una casa de huéspedes.

En los últimos meses, los mandos de las fuerzas militares estadounidenses en Afganistán plantearon la posibilidad de atacar objetivos en las zonas fronterizas de Pakistán.

Según varios funcionarios, el objetivo era bombardear con artillería desde Afganistán las zonas fronterizas de Pakistán, atacar puntos estratégicos con misiles lanzados desde aviones teledirigidos "Predator" o intervenir con unidades de elite de la CIA.

Los servicios secretos estadounidenses consideran que las indómitas áreas tribales paquistaníes son para Al-Qaida y los talibanes un santuario desde el que pueden planear ataques terroristas.

Las áreas tribales, áridas y montañosas y jamás bajo completo control del Gobierno de Pakistán, sirvieron de refugio para muchos simpatizantes de los talibanes y de Al Qaeda tras la caída del régimen integrista de Afganistán, a finales de 2001.