El ministro italiano de Asuntos Exteriores, Franco Frattini, cree que es necesario un banco de datos europeo con las huellas dactilares y el ADN de los niños de etnia gitana que viven en campamentos nómadas, pues sin una identidad no tienen derechos, ni pueden ser protegidos.

El que fuera comisario europeo de Justicia señaló ayer, en una entrevista con el diario italiano "Il Messaggero", que "la primera manera de proteger a un menor es darle una identidad y un documento", saber quién es, pues sin ella "un niño gitano no tiene derecho a la sanidad y a la escuela".

Además, "sin una identidad es imposible sustraer estos pequeños fantasmas inocentes de las manos de los pederastas y de los traficantes de niños".

Frattini consideró que es necesario "un banco de datos europeo con los nombres, las huellas, con las señales del ADN de todos estos niños, para hacer su vida más segura". El ministro señaló que "si Europa no adopta esta solución de las huellas, del ADN, que me parece que la única posible, nosotros la adoptaremos de todas maneras", aunque precisó que respetarán siempre las normas europeas.

El Gobierno italiano ha puesto en marcha un proceso para crear un censo de las personas que viven en barrios marginales y asentamientos, que incluye la toma de las huellas dactilares, incluidos los menores.