Los presos intentaron escapar de la prisión de New Bell cortando la electricidad y abriendo fuego contra los celadores con fusiles automáticos. "Los celadores de la guardia respondieron al fuego con fuego. En el momento en que acabaron los disparos habían muerto 16 presos y otros tres habían sufrido heridas graves", informó la emisora. Dos guardias resultaron heridos leves.

Las fuerzas de seguridad han bloqueado lo barrios próximos a la prisión para capturar a cualquier preso que haya podido aprovechar la situación para escapar. El penal de New Bell en Douala, construido en 1933 para 800 presos, cuenta con una población reclusa de alrededor de 3.000 personas, de los cuales dos tercios están a la espera de juicio.

Las organizaciones de Derechos Humanos han asegurado que las prisiones de Camerún están saturadas, que las condiciones sanitarias son pobres y que los casos de violencia y tortura son frecuentes. El nuevo código penal de 2006 limitó a seis meses el periodo de prisión preventiva, renovable por otros seis, pero la medida no está siendo aplicada en su totalidad.