La huelga del sector agropecuario en Argentina se reanudó ayer con numerosos bloqueos de carreteras debido a los incidentes y la detención de un dirigente de los productores en el interior del país. Las cuatro mayores asociaciones agrarias habían anunciado el sábado el inicio del cuarto paro en poco más tres meses a partir de la 00.00 hora local de ayer, aunque aclararon que finalizará en la medianoche del miércoles.

Sin embargo, las bases reanudaron las protestas en las carreteras hasta el punto de que se registraron ayer cuatro bloqueos totales y 25 parciales, en el marco del conflicto del sector con el Gobierno argentino, informó Vialidad Nacional.

"Seguimos con las protestas y estamos muy preocupados por lo que pasó ayer (por el sábado)", dijo ayer un huelguista en la ruta 14, en la provincia de Entre Ríos, donde el sábado se registraron enfrentamientos con la policía cuando productores y transportistas intentaban mantener el bloqueo.

Durante los incidentes, el dirigente de la Federación Agraria Argentina (FAA) Alfredo De Angeli fue detenido junto a otros 18 productores agropecuarios, aunque horas más tarde fueron liberados y recibidos nuevamente en la protesta por numerosos pobladores.

Los incidentes originaron la reanudación de numerosos cortes de rutas en el interior de Argentina y "cacerolazos" en distintos barrios de Buenos Aires, mientras un grupo organizaciones sociales afines al Ejecutivo se manifestaron en la Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno, con la presencia del ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007). Al anunciar el paro, que consiste en la no comercialización de productos agropecuarios, los dirigentes agrarios "repudiaron la provocación y la represión de Gualeguaychú", en Entre Ríos.

"Nosotros estamos acá para hacer control de granos (en los camiones que pasan por la ruta), tal cual el mandato de la Mesa de Enlace", advirtió un huelguista en declaraciones televisivas. Las entidades agrarias también cuestionaron "la falta de voluntad" de diálogo del Gobierno de Cristina Fernández, con el que mantienen un conflicto iniciado hace 96 días a raíz de cambios impositivos para la exportación de granos.