El oncólogo del Instituto de Enfermedades Neoplásicas de Lima, Pédro Sánchez, declaró que Fujimori se recupera de forma satisfactoria, según "Radio Programas del Perú" (RPP).

La salud del ex gobernante ha concitado la máxima atención del histórico proceso judicial, dado que sucede cuando iban a comparecer testigos claves como su ex asesor Vladimiro Montesinos, encarcelado por orquestar la gran trama de corrupción que llevó a Fujimori a huir a Japón en 2000.

El Tribunal Supremo de Perú ha pospuesto esta declaración al autorizar el ingreso del acusado en el hospital y tras suspender este miércoles el proceso durante una semana.

Estos problemas de salud han generado suspicacias, ya que la acusación dudó en un primer momento de la dolencia.

Aunque una junta médica confirmó la enfermedad, los detractores de Fujimori alertaron de que el proceso podría anularse, ya que la ley peruana establece que un juicio oral no puede suspenderse más de ocho días consecutivos.

Esto ha sido negado por el abogado de Fujimori, César Nakazaki, quien reiteró que el desarrollo del juicio favorece al ex gobernante.

"Ante el juicio estamos muy satisfechos", declaró el letrado al término de la última audiencia, al reiterar que Fujimori es el más interesado en que continúe, tras la celebración de 67 audiencias.

Fujimori está acusado de planificar, organizar y dirigir las matanzas perpetradas por el grupo militar encubierto Colina en Barrios Altos (1991) y La Cantuta (1992), en las que murieron 25 personas.

También por el secuestro del periodista Gustavo Gorriti y el empresario Samuel Dyer, tras el autogolpe de Estado de 1992.

Se da la paradoja de que mientras un 53,3 por ciento de peruanos encuestados considera a Fujimori culpable de esos delitos, un 64,7 por ciento aprueba su gestión presidencial.

Así se refleja en un reciente sondeo de la empresa CPI, según el cual la razón principal de la aceptación al régimen fujimorista fue la erradicación del terrorismo, aunque el 50,4 por ciento de los consultados consideró que su gobierno fue corrupto.

Testimonios como los de los periodistas Gustavo Gorriti y Umberto Jara hasta el del ex general Rodolfo Robles, quien denunció la existencia del grupo Colina en 1993, podrían evidenciar la culpabilidad del ex gobernante, opinan los comentaristas.

Por ahora han pasado por el estrado casi todos los miembros de Colina, de los que dos aseguraron que Fujimori conocía sus actividades y otros lo negaron, como el líder del grupo, el ex mayor Santiago Martin Rivas.

El abogado defensor alega que no existen pruebas documentales de que Fujimori tuviera el mando operativo del grupo militar encubierto y, por tanto, vínculos con los crímenes, mientras que la Fiscalía y la defensa civil afirman que los testimonios confirman su responsabilidad.

Por el crimen de La Cantuta ya fue condenado a 35 años de prisión en abril pasado el ex general Julio Salazar Monroe, ex jefe de los servicios de información, al ser considerado "autor mediato" de la masacre.

En lo que coinciden todas las partes, incluida la mayoría de los peruanos, es que el proceso se desarrolla de forma impecable y que cuando concluya, previsiblemente en agosto, será difícil cuestionar el veredicto.