El Consejo de Seguridad de la ONU adoptó ayer por unanimidad una resolución que autoriza a navíos de guerra extranjeros a perseguir dentro de las aguas de Somalia a embarcaciones piratas si reciben el consentimiento de ese país.

Los quince integrantes del máximo órgano de Naciones Unidas consideran en el texto que la ``grave preocupación´´ que representan los asaltos a barcos civiles que se suceden ante la costa del país africano merecen el uso de la fuerza.

Por ello especifican que, previa notificación de Somalia al secretario general de la ONU, los navíos militares de países que colaboran en la lucha contra la piratería pueden entrar en aguas territoriales somalíes con la misma autoridad con que actúan en alta mar. Una vez allí, tienen la autoridad de emplear ``todos los medios necesarios para reprimir los actos de piratería y robo armado´´ que han causado una alarma internacional.

La resolución impulsada con el apoyo de 17 países se ampara en el capítulo VII de la Carta de Naciones Unidas, que autoriza el uso de la fuerza para hacer cumplir las decisiones del Consejo de Seguridad.

El documento es parte de un paquete de medidas tomadas por la comunidad internacional en los últimos meses ante el aumento del número de ataques contra barcos mercantes, de pesca y de recreo en esas aguas.

El embajador de España ante la ONU, Juan A. Yáñez Barnuevo, que en las últimas semanas ha encabezado un grupo informal en apoyo de la toma de medidas en este sentido, se declaró satisfecho con la adopción del texto.

A la salida de la reunión del Consejo el embajador español aseguró que el documento contiene todo los puntos que su grupo había propuesto y subrayó la larga lista de países que lo ha apoyado, en la que se encuentra España. ``La resolución sale con un respaldo importante y eso le da mucha fuerza´´, valoró.

Los actos de piratería en aguas del Indico han causado alarma entre los países, pues embarcaciones pesqueras y de recreo de diferentes nacionalidades han sufrido el abordaje y secuestro por parte de piratas somalíes que luego piden cuantiosos rescates para liberar a sus víctimas.