Kouchner, en una rueda de prensa antes de abandonar Quito, apuntó que su país quiere "aplacar" las tensiones entre Colombia, Ecuador y Venezuela para conseguir un ambiente que facilite la liberación de los secuestrados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

El ministro de Francia visitó hoy Quito para tratar con el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, la eventual reanudación de los contactos para conseguir la liberación de los secuestrados, entre ellos Betancourt, ex candidata a la presidencia de Colombia y que también tiene nacionalidad francesa.

En la entrevista, además de hablar de los secuestrados, Correa recalcó ante Kouchner la necesidad del respeto a los Derechos Humanos, y también trataron del desarrollo y la lucha contra la pobreza, dijo el ministro francés sin más precisiones.

Mañana, Kouchner viajará a Caracas, donde tiene previsto entrevistarse con el gobernante venezolano, Hugo Chávez, que realizó un papel de mediador con las FARC, por el cual se logró la reciente liberación de seis ex congresistas rehenes.

El responsable de la diplomacia francesa recalcó que, a sus entrevistas con Uribe, Correa y Chávez, lleva un mensaje de "compresión", porque cada uno de los tres países "tiene derecho a la seguridad y la soberanía".

Para él, son importantes los "esfuerzos aunados", como fueron los de Venezuela y Colombia, para la liberación de los secuestrados por las FARC y aseguró que seguirán sus esfuerzos hasta conseguir un "acuerdo humanitario" que lo permita.

El acuerdo humanitario "significa primero que los rehenes civiles, todos los rehenes, sean liberados", remarcó el ministro francés, para quien "no hay un sólo motivo político" para que prosigan esos secuestros por parte de la guerrilla de las FARC.

Francia, junto con España y Suiza, seguirán con los esfuerzos para la liberación de los rehenes, una cuestión, afirmó, que también se tratará el mes próximo en Lima, en la Cumbre América Latina, El Caribe y la Unión Europea (UE).

Sin embargo, Kouchner reconoció que, tras la operación militar colombiana contra un campamento de las FARC en Ecuador, el pasado 1 de marzo, donde murió el portavoz internacional de esa guerrilla, alias "Raúl Reyes", perdieron los contactos y, ahora buscan "otros interlocutores".

En Bogotá y Quito, Kouchner encontró "comprensión", pero "contactos no", por lo que afirmó que mañana seguirá buscándolos en Caracas.

Se opuso rotundamente a una "solución militar" para la liberación de los secuestrados, pues en su opinión "los condenaría" y sería "un peligro mayor" que la actual situación "infrahumana" en que viven.

Sobre la salud de Betancourt, reconoció no saber cual es, pues han recibido "informaciones contradictorias", unas que señalaban que estaba "muy mal" y otras, más recientes, incluso una de ayer en Colombia, de que, "si no iba muy bien, su estado no era tan grave".

Por su parte, el ministro de Seguridad de Ecuador, Gustavo Larrea, tras entrevistarse con Kouchner, dijo que Quito y París "apuestan" por un acuerdo humanitario para la liberación de los secuestrados, víctimas de lo que calificó de "delito execrable".

El ministro ecuatoriano recalcó que Francia y Ecuador coincidieron en que hay que insistir a las FARC en la "necesidad" de que liberen a "todos los secuestrados".

Como parte de su agenda, el ministro galo almorzó con su homóloga ecuatoriana, María Isabel Salvador, posteriormente, se reunió con el ministro de Gobierno, Fernando Bustamante, antes de mantener un encuentro con el presidente Correa.

Una fuente diplomática ecuatoriana señaló que en las conversaciones se abordó el conflicto diplomático entre Ecuador y Colombia y se analizaron posibles soluciones para el restablecimiento de las relaciones entre los dos países, rotas desde hace dos meses, tras la incursión colombiana contra un campamento de las FARC en territorio ecuatoriano.

Por otro lado, entre cada una de las reuniones el ministro francés aprovechó para hacer turismo en la capital ecuatoriana, tras lo cual regresó esta noche a Bogotá, desde donde mañana volará a Caracas para entrevistarse con Chávez.