Saud Abú Ramadán / gaza

El movimiento islamista Hamás logró ayer introducir dos todoterrenos militares y un vehículo blindado cargados con explosivos en un puesto fronterizo de Gaza y herir a 16 soldados israelíes, en el ataque más grave registrado en la zona desde que Israel abandonó la franja en el año 2005. Tres milicianos resultaron muertos en el ataque suicida, que tuvo lugar en la mañana de ayer en el puesto fronterizo de Kerem Shalom, por el que entran los suministros humanitarios a la franja de Gaza.

El ataque ha sido "el mayor y en el que ha utilizado una mayor cantidad de explosivos desde que abandonamos Gaza" dijo la comandante Avital Leibowitz, portavoz militar en Gaza, que explicó que los vehículos lograron acercarse tanto porque los todoterrenos eran muy similares a los que utiliza el Ejército israelí.

Según Leibowitz los vehículos, cargados con cientos de kilos de explosivos, pertenecían originariamente al movimiento nacionalista Al Fatah, quien los recibió como donación de la cooperación internacional para que sus fuerzas de seguridad mantuvieran el orden en la franja.

Estos coches, junto con otras armas de Al Fatah, cayeron en manos de Hamás cuando el movimiento islamista expulsó a las fuerzas leales al presidente palestino, Mahmud Abás, y tomó el poder en la franja, en junio del 2007. Al amparo de la niebla, los tres vehículos lograron entrar en el lado israelí del puesto fronterizo y acercarse a los soldados.

"Los milicianos que habían en el vehículo blindado salieron y empezaron a disparar contra los soldados, mientras que los dos jeeps se acercaron a los soldados y explotaron", detalló Leibowitz, que confirmó que un total de dieciséis soldados israelíes resultaron heridos en el ataque, trece de ellos leves. Según la portavoz los daños no fueron mayores porque muchos de los soldados israelíes se encontraban protegidos dentro de vehículos blindados.