Marta Rivero / A ESTRADA

El Concello de A Estrada se dispone a enviar la maquinaria municipal a la pista de Riomao, en la parroquia estradense de Loimil, para arreglar los destrozos que causó en el pavimento de la misma la empresa Dozón-UTE cuando acometían las obras de la autopista, a la que la administración local reclamará los gastos por vía judicial. Así lo confirmó ayer el alcalde en funciones, José Antonio Maceira, quien adelantó que, desde el concello, pretenden comenzar las obras de reconstrucción este viernes o el próximo lunes.

Hacía tres meses que la vía había sido asfaltada, pero la construcción del tramo Santiago-Alto de Santo Domingo de la autopista Santiago-Ourense, del que es responsable la citada empresa, dejó el pavimento en un estado paupérrimo. La carretera "ameaza moito perigo" y las quejas de los vecinos son cada vez mayores así que el concello, ante la inactividad de los responsables del estado de la pista, se dispone a intervenir en los próximos días.

Maceira también apuntó que si bien hubo un tiempo en el que la empresa Dozón UTE se encargaba de acometer de vez en cuando algunos arreglos en los desperfectos que ocasionaba, actualmente "non ten nin unha mala palabra nin unha boa acción".

Cabe recordar que a la demanda que el concello pretende interponer en los próximos días a la constructora, se suma una anterior denuncia que la administración local presentó a principios de abril en el juzgado de Lalín debido a que la firma Dozón UTE tiene su sede en esa comarca.

Currelo

El acceso a la autopista localizado en este lugar de la parroquia estradense de Orazo también despertó las quejas del concello ya que se trata de una carretera que cuenta "cun 24 por cento de pendiente a pesar de que non está autorizado máis do 7 por cento". Esta vía pasó de ser un aglomerado a una pista de tierra y sus obras actualmente se encuentran paralizadas.

Maceira señaló además que este acceso cuenta con una mala señalización así como que, en esta parroquia, la empresa Dozón UTE bacheó una de sus pistas mientras que su compromiso con el concello había sido el de cubrir la vía con una capa de rodadura, algo que jamás se realizó. En este sentido, afirmó que las intervenciones requeridas por la administración local a Dozón-UTE se acometieron tan sólo en parte y que, de forma progresiva, se fueron perdiendo los compromisos que adquirían los gerentes de la firma a medida que éstos iban siendo relevados.

Tal es la situación que Maceira declaró que "o concello vai pedir responsabilidades de todo tipo ata onde poida chegar xudicialmente" mediente el abogado que lleva el caso, Carlos Palmou.