El periodista Rafael Cid presentó ayer en Ourense el libro "Carrillanos, os túneles dun tempo", un texto que relata la "epopeya" que supuso la construcción del tren entre Zamora y Ourense, que se prolongó durante 30 años. Es, si duda, el reflejo de una época, en la que ya se intuía la importancia del tren para Galicia y en la que se pone de manifiesto la dureza de la vida y del trabajo de entonces. El libro es fruto de la película documental del mismo nombre realizada también por este periodista ourensano.

El libro relata los acontecimientos que rodearon esta mítica construcción que tiene de actualidad el hecho de que coincide precisamente con el tramo del AVE que tiene que entrar por Galicia. Entre 1926 y 1.956 trabajaron en la construcción de lo que el autor denomina "camino de ferro" miles de trabajadores a los que la historial puso el nombre de carrilanos, a veces con connotaciones peyorativas, ya que así llamaban los lugareños a aquellos que venían de fuera a trabajar, tal y como comenta Rafael Cid en el acto de presentación que tuvo lugar en el salón de acto de la Diputación Provincial y a la que asistió su presidente, José Luis Baltar.

Imágenes

Editorial Xerais se encargó de editar este libro que recoge numerosas fotografías de la época que tuvieron que ser localizadas con dedicación y esfuerzo por parte del escritor. Cuenta Rafael Cid en su obra la muerte del ingeniero de la obra José Fernández-España y las luchas que había por la elección del trazado. El autor se para en relatar el esfuerzo de los trabajadores en realizar los túneles de O Padonerlo, obra que se realizó con muy escasa maquinaria, y comenta los apoyos de la población para que se construya el ferrocarril y también las luchas obreras: "En Verín propágase entre os espavorecidos veciños a voz "¡Quén venen os da vía, que veñen os da vía", E como o anuncio da chegada dos carrilanos da Guiña e de Laza, que paralizan la villa durante días; pechas os comercios, suspéndense o mercado e a x ente reclúese nas casas. Pretenden diroxirse Ourense, e como as camionetas das obras que usaron para trasadarárense aló so insuficientes, deciden facerse con coches privados. Intervén a Garda Civil, que dispara oa aire, e un carrilano guinda un barreno de dinamita ós pes dos gardas".

Rafael Cid hablar de los romances que creó el pueblo con la obra y también de Nieves Fariza Alonso, una sindicalista que lucha porque las viudas cobren por sus maridos muertos en la obra. El libro y la película recrean un pasado lastrado por la guerra.

En el acto estuvieron presentes otras autoridades oficiales, además del presidente de la Diputación Provincial. Así como el presidente y gerente del Inorde, José Freire Couto y José Manuel Rodríguez. Con su presencia se hacía un gesto a la labor que está desarrollando esta institución para recuperar las estaciones de tren de la provincia, cuyo mal estado lamentó Baltar.