El ayuntamiento realizará entre hoy y mañana los trabajos de fresado de la calzada de la nueva glorieta de O Burgo que obligará a restringir el tráfico en toda la zona y a cortar, de manera puntual, el puente de O Burgo. Los trabajos se realizarán aprovechando el atardecer y las horas nocturnas, cuando la afluencia de tráfico es menor en este punto.

Este nuevo corte en la red viaria de la ciudad se suma a los trabajos de mejora de la plaza Concepción Arenal, que tras meses en obras ha supuesto un caos de tráfico en los accesos al puente de A Barca. La situación se agrava especialmente con las obras de saneamiento del río, que ha obligado en este último año a levantar todos los carriles de la avenida de Uruguay.

En cuanto a la mejora de la rotonda de O Burgo se ejecutará en dos fases: fresado y asfaltado, pero está previsto que en estos dos días sólo se realice el levantamiento de la calzada. En una fecha todavía no definida se procederá a asfaltar.

Las restricciones de tráfico comenzarán a las siete y media de la tarde en el entorno de A Santiña y de la calle Domingo Fontán, para proceder, a partir de las nueve y media de la noche, a cortar el acceso más inmediato a la misma glorieta, en la calle Juan Manuel Pintos.

Vías alternativas

Para evitar los problemas de tráfico que puedan suscitar estas obras, la empresa y la Policía Local han puesto en marcha un operativo especial que permitirá abrir vías alternativas de acceso a la ciudad y al barrio de O Burgo, respectivamente. El tráfico procedente de la avenida de A Coruña se desviará hacia el centro de la ciudad a través de la calle Luis Otero (rodeando el campo de Pasarón) y de la avenida de Compostela.

Cuando se cierre al tráfico el puente de O Burgo, a partir de las nueve y media de la noche, los coches que circulen por la avenida del Uruguay tendrán que ir por el puente de Santiago para poder acceder al barrio de O Burgo, a la carretera de A Coruña, y a otros puntos de la ciudad.

Desde el ayuntamiento se asegura que la mayor parte de los trabajos se realizarán de noche y los cortes de tráfico no serán absolutos, ya que se irá restringiendo la circulación a medida que vaya siendo necesario. Se afirma desde el ejecutivo local que el núcleo central de la glorieta no dejará de funcionar, por lo que confían en que los perjuicios al ciudadano sean mínimos.