Adriana Ramos, una vecina del inmueble número 96 de la avenida de Buenos Aires, denunció en la Comisaría de Policía que a las 12.53 horas de la madrugada del domingo le quemaron el coche de su bebé en el portal del edificio, después de forzar la puerta de entrada.

Asimismo, al efectuar la denuncia, en la que dejó constancia de distintos daños en el local, acudía, junto con mujer, inmigrante colombiana, Mª Ángeles Álvarez, también residente en el edificio.

El inmueble, de cuatro plantas, "es antiguo y de madera en su interior, así que podía haber ardido entero, con nosotros dentro", afirma Mª Ángeles Álvarez, mientras la joven Adriana Ramos expresa que es consciente del riesgo que "de haberse extendido el fuego" hubieran corrido sus vidas. "Sobre todo, la de mi hijo de tan sólo meses, que no puede huir con la misma facilidad que una persona mayor", matiza.

Mª Ángeles Álvarez explica que sobre las 10.00 de la mañana, al salir de su vivienda, sita en el primer piso, se encontraba con "el carrito todo quemado" en el portal y con las paredes "negras por el humo", aunque matiza que ya no había fuego, "ya que debió apagarse sólo".

Tras percatarse de lo ocurrido, avisó a Adriana Ramos, que vive un piso más arriba, y posteriormente llamó a la Policía Nacional, que se personó en el lugar del incidente para efectuar la inspección ocular.

Mª Ángeles Álvarez narra que sobre las 7 de la madrugada escuchó golpes en la puerta de entrada al edificio y a continuación pasos por las escaleras.

Adriana Ramos, que hace unos meses se trasladó a vivir al citado inmueble de la avenida de Buenos Aires, explica que no tiene problemas con nadie y que desconoce las razones por las qué se ha producido el ataque hacia el coche de su bebé, aunque desconfía de unos nuevos inquilinos que hace un mes alquilaron uno de los pisos del edificio. "No les conozco, ni nunca me he dirigido a ellos, pero se que son muy conflictivos e intentan forzar la puerta del portal cada noche, aunque supongo que tendrán llave".