El PNV abogó ayer en Bilbao por modificar el artículo 8 de la Constitución porque concede al Ejército la "tutela" del debate sobre el modelo de Estado al hacerle garante de la unidad de España, lo que condiciona a los partidos políticos. El portavoz del PNV, Iñigo Urkullu, aseguró ayer que su partido no acepta "tutelas de organizaciones armadas" como son ETA o el Ejército español. Urkullu afirmó en una rueda de prensa que las declaraciones del teniente general José Mena "son un episodio que no es baladí" y recordó que el PNV lleva veinticinco años criticando el "anacronismo" que supone el artículo 8 de la Constitución.
El dirigente del PNV, que dijo que se debe reformar el "papel del Ejército", opinó que el citado título de la Carta Magna "da por entendido que los gobernantes y los partidos políticos están de paso y que la institución que siempre permanece es el Ejército, al que hace garante de la unidad de España".
Para el portavoz del PNV, hay que establecer "garantías suficientes de que las formaciones políticas son las únicas con capacidad de decidir" sobre el modelo de Estado porque la actual "tutela" del Ejército "condiciona las legítimas y democráticas aspiraciones" de las fuerzas políticas.
Propuesta de paz
Destacó que en su propuesta para la pacificación y normalización de Euskadi el PNV estableció la "no aceptación de la tutela de organizaciones armadas", referida en primer lugar a la condición de que el proceso se inicie tras el cese definitivo de ETA, "pero tampoco la de otras instancias armadas como el Ejército español".
Aseguró que ETA "es la responsable primera de dar el paso de un alto el fuego definitivo" y que, por tanto, no admite imposiciones de la banda terrorista sobre el proceso de normalización política, pero también advirtió que no las aceptarán "por parte de otras organizaciones armadas u otras instancias armadas como es el caso del Ejército español".
La comparación ya ha desatado la polémica. Conchita Martín, viuda del teniente coronel Pedro Antonio Blanco, la primera víctima de ETA tras la ruptura de la tregua de 1998, ha pedido al Fiscal General del Estado, Cándido Conde-Pumpido, que actúe contra Urkullu. "Desprestigiar a cualquier institución del Estado es muy fácil para un nacionalista", dijo, recordando al portavoz del PNV que el Ejército "no ha atacado la vida de nadie y, sin embargo, los terroristas, a los que auspicia el señor Urkullu, sí nos ponen en peligro a nosotros".
Por su parte, el Ministerio de Defensa consideró ayer "ofensivo e indigno" que el PNV compare a los "asesinos" de la banda terrorista ETA con las Fuerzas Armadas, "una organización democrática que pierde la vida por los demás". Tras incidir en que las manifestaciones del responsable peneuvista además suponen "una grave ofensa" a las víctimas del terrorismo etarra, entre las que se encuentran numerosos militares, las fuentes consultadas indicaron que a Defensa le agradaría que el PNV animara a Urkullu a reconsiderar su postura.
El portavoz del PP vasco, Leopoldo Barreda, pidió ayer al PNV una disculpa tras las declaraciones de Urkullu. "En democracia no todo vale. Que el PNV esté acostumbrado a equiparar a víctimas con verdugos, a ETA con el Ejército o a demócratas con terroristas no justifica ni exculpa el continuo uso de este tipo de referencias".
El portavoz socialista en la Comisión de Defensa, Jesús Cuadrado, consideró "un auténtico despropósito" que el PNV haya comparado al Ejército con ETA, al tiempo que aconsejó a los nacionalistas vascos "un cursillo acelerado de sistema democrático".
