Los manifestantes, alrededor de trescientos, consideran que en los últimos años se está produciendo una pérdida progresiva de los derechos civiles.

Durante la marcha se corearon consignas contra las intervenciones "antidemocráticas" de las fuerzas de seguridad y contra el "constante acoso y persecución al que están sometidos los movimientos por los derechos sociales, políticos y sindicales en Galicia".

Asimismo, censuraron las "oleadas represivas" de la Guardia Civil, en concreto la detención de varios miembros del colectivo independentista AMI, intervención en la que consideran que se vulneraron derechos como la presunción de inocencia.

Los manifestantes recorrieron el centro histórico de Santiago de Compostela desde la Alameda bajo el lema: "En defensa de los derechos. Paremos la represión".