El Celta ultima los preparativos para convertir Balaídos en una gran fiesta con motivo de la visita al coliseo vigués del Athletic de Bilbao, rival del cuadro celeste en la lucha por la permanencia. Con la idea de captar espectadores, el club vigués organiza una romería popular en las inmediaciones del estadio al más puro estilo gallego, con viandas y vinos del país y música tradicional, aderezado todo ello con ambientación y motivos celestes.
A la iniciativa se ha sumado la federación de peñas, que aparca momentáneamente sus diferencias en torno a la figura del entrenador, Fernando Vázquez, para volcarse con el equipo en tan importante compromiso.
El club ofrece a sus abonados la posibilidad de hacerse con entradas para acompañantes al precio de 10 euros, independientemente de la grada. La fiesta, amenizada por grupos de gaiteiros, comenzará a mediodía y se prolongará hasta las cinco de la tarde, hora fijada para el inicio del choque. El club entregará rifas a todos los abonados y espectadores que asistan al encuentro del Celta B, que se mide a las 12.00 en Barreiro, al Lanzarote en otro encuentro decisivo para la permanencia.
Por otra parte, las localidades para el partido comienzan a despecharse desde hoy en las taquillas del estadio a los precios habituales, esto es, entre 12 y 45 euros, en función de la grada.
Un millar de rojiblancos
El choque contará con una nutrida presencia de aficionados del Athletic. El Celta ha vendido 500 localidades a la Federación de Peñas del club bilbaíno. Fuentes policiales calculan que hasta 1.200 seguidores rojiblancos pueden desplazarse a Vigo para el partido, entre ellos un nutrido grupo de la peña radical Herri Norte, hermanada con los Celtarras, que cada año visita el coliseo vigués con el Athletic.
