Las casi 150 páginas de este programa recogen una serie de medidas en diversos ámbitos, entre ellas las destinadas a la transparencia de la vida pública local.
De esta forma, los socialistas proponen un nuevo régimen de incompatibilidades para los cargos municipales, la publicidad de los registros de bienes y actividades de los mismos, y una "tolerancia cero" a la especulación urbanística.
Así, plantea una estrecha colaboración con las fiscalías especiales y "duras sanciones" ante actuaciones urbanísticas ilegales.
El PSOE "denunciará los casos de corrupción, erradicará la que pueda detectarse en sus filas y se negará a gobernar con quienes la practiquen", reza el Programa Marco.
De igual forma, promete la creación de auditorías ciudadanas, oficinas de control presupuestario en cada ayuntamiento, un código ético de conducta en todas las empresas públicas municipales, la celebración anual de un debate sobre el estado de la ciudad, la regulación de una carta de derechos y deberes del vecino, y la práctica de paridad e igualdad de género en los organismos locales y empresas públicas municipales.
En materia de seguridad, convivencia y civismo, los socialistas abogan por crear una comisión estatal de seguridad local copresidida por el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias y por el secretario de Estado de Seguridad.
Además, plantea crear la figura de "agente-tutor" de la Policía Local en cada centro escolar, una serie de ordenanzas contra el ruido o el consumo de bebidas alcohólicas en la calle, la reforma del padrón municipal para impedir la inscripción abusiva de personas en un mismo domicilio, la creación de unidades de protección doméstica, la centralización de los sistemas "091" y "092", y la incorporación de los cuerpos de seguridad al sistema de urgencias "112".
Para lograr una "fiscalidad más cómoda", el PSOE promovería la creación de la denominada "cuenta corriente tributaria local" para facilitar el abono de tributos y tasas.
Todos ellos, como los impuestos de bienes inmuebles, de circulación o de recogida de basuras, podrían sumarse y fraccionarse en pagos de doce mensualidades.
Además, el PSOE promete ayudas y bonificaciones por hijos a cargo y la participación de los ciudadanos en la tramitación de los presupuestos municipales.
En el apartado de movilidad, apuesta por el transporte público y la progresiva peatonalización de los centros urbanos mediante programas como el denominado "calmar el tráfico", que incorporaría una reducción de los límites máximos de velocidad, más semáforos y más rotondas.
Propone igualmente taxis compartidos para el acceso a pedanías o áreas rurales cercanas a los centros urbanos que no son idóneas para las líneas de autobuses, la construcción de aparcamientos disuasorios y la ampliación de los horarios del metro.
En el aspecto autonómico, el PSOE defiende culminar las reformas estatutarias, cree "fundamental" y "urgente" la reforma del Senado, y respalda una modificación de la financiación autonómica que se afronte de forma multilateral para que todas las comunidades den a sus ciudadanos el mismo nivel de prestación de servicios públicos.
Además, apuesta por crear espacios fiscales propios en las comunidades con el fin de garantizar la corresponsabilidad fiscal dejando al Estado como el garante de la cohesión y la solidaridad cuando los recursos autonómicos no cubran los costes efectivos de los servicios públicos.
