Tras nueve meses esperando para ser intervenida en el Hospital Xeral y después de que el tiempo agotara su paciencia, María Florinda G. R., natural de Mos, denunció ayer su situación ante el Defensor del Paciente. "Casualidades" de la vida, el mismo día que su demanda se hacía pública, la paciente era ingresada para ser operada hoy.

En junio del año pasado una inflamación en el cuello alertó a esta paciente, que de inmediato se dirigió al Hospital Meixoeiro para ser examinada. Después de realizarle diferentes pruebas de neurocirugía, se le diagnosticó el Síndrome de Cushing. Una enfermedad provocada por la excesiva producción de hormona adrenocorticotropa por parte de la glándula pituitaria.

"Tenía fuertes dolores de cabeza, me cayó mucho pelo, padecía insomnio y en este tiempo pase de pesar 60 a 73 kilos", describía ayer esta paciente su "odisea" antes de ser ingresada en el Hospital Xeral y después de haber denunciado su situación.

María Florinda G.R. recrimina que en septiembre de 2006 y, ante la gravedad de la enfermedad, "en el Hospital Xeral me comunicaron que sería intervenida en un breve período de tiempo que no superaría los tres meses". Pasado este tiempo, la paciente todavía continuaba esperando la llamada y, tras doblegarse el plazo previsto de espera, decidió tramitar la denuncia. La respuesta del subdirector médico del Xeral de Vigo fue que "hay casos más urgentes que atender primero", comenta.

Sorprendida por la casualidad de ser ingresada ayer -el mismo día que tramitó la denuncia- María Florinda G.R. confesaba estar ahora "más tranquila". Sin embargo no podía ocultar su incertidumbre de si el largo período transcurrido desde que le fue diagnosticada la enfermedad podría haber agravado el problema. "Me dijeron que podía afectarme a los riñones e incluso a la vista", decía preocupada antes de su ingreso.