Acisclo Manzano (Ourense, 1940) sueña una pieza para ubicar en la Praza do Obradoiro de Santiago. "Independientemente de los problemas de Patrimonio, ¿por qué no proponerlo?", sugiere. "El estanque de las creencias" es una escultura de 15 metros de altura, realizada en bronce y hierro, que representa al "peregrino universal en busca del encuentro con la Verdad y consigo mismo", define el artista. Por su altura y emplazamiento, busca una mirada mirada a los ojos del Maestro Mateo, representado en el pórtico de la Catedral. La pieza está colocada sobre un estanque de agua termal que el artista concibe para que los peregrinos se laven a modo de purificación antes de entrar al templo. Manzano está representado en todos los museos de Galicia y un centenar de sus obras lucen en espacios públicos.