Un vecino de Vilagarcía de Arousa, José María Vila Tejedo, de 68 años, se encuentra en estado grave después de que un bloque de piedra de unas 19 toneladas cayera ayer sobre su turismo, cuando circulaba por la N-120, a la altura del concello ourensano de Ribadavia.

El accidente se produjo sobre las 16.15 de la tarde en el acceso a la N-120, desde la OU-504. A esa hora, un camión que transportaba piedra desde Orega (Leiro) hasta Ponteareas, perdió parte de la carga, que acabó sobre la calzada y llegó a alcanzar al vehículo que circulaba detrás y en el que viajaba el vilagarciano.

El coche quedó parcialmente aplastado por un inmenso bloque de granito, por lo que su conductor tuvo que ser excarcelado por el Grupo de Intervención Rápida (Grumir) de Ribadavia. Debido a lo aparatoso del accidente, el herido fue trasladado en helicóptero hasta el Complejo Hospitalario de Ourense, donde lo atendieron por una fractura de tobillo y contusiones. Su pronóstico es grave pero no se teme por su vida.

Fuentes sanitarias informaban a última hora que el herido se encontraba consciente y no paraba de repetir "qué suerte tuve", consciente de la gravedad de la situación.

El camionero que transportaba el bloque de granito, Manuel Pérez, de 44 años y natural de Porriño (Pontevedra), aseguraba ayer que en 25 años de transportista nunca le había pasado nada igual, al tiempo que insistía en que "la piedra iba perfectamente inmovilizada, pero en el cambio de rasante debió de moverse debido al agua de la lluvia o al lodo".

Por otra parte, un camión con 240 cerdos volcó en la A-52 a su paso por el municipio ourensano de A Mezquita, lo que obligó a cortar uno de los carriles. Decenas de animales perecieron en la colisión, mientras que la mayoría sobrevivió y, atontados, deambulaban por la calzada hasta que los veterinarios de la Xunta se hicieron cargo de ellos.