Los acuerdos entre los técnicos del Ministerio de Fomento, de la Xunta y del Concello se cerraron en el último trimestre del año pasado. Los "flecos" que restaban sobre la financiación de la nueva estación pasante en Vigo para el AVE también quedaron resueltos en las reuniones celebradas a primeros de enero. Sin embargo, el convenio en el que deben plasmarse dichos acuerdos no ha llegado aún al ayuntamiento.

Esa es al menos la crítica que realiza el gobierno local, sustentada por los informes de los técnicos municipales que participaron en las negociaciones, con lo que el proceso acumula ya meses de retraso. El convenio debe ser suscrito por el ministerio y por las administraciones autonómica y local, y es condición indispensable para que pueda redactarse el proyecto definitivo y licitarse las obras de los 2,4 kilómetros de vía entre la zona de la avenida de de Buenos Aires y la estación del ferrocarril, que deberá enlazar posteriormente con la salida sur.

En el convenio se fijan los costes que tendrá el trazado de la nueva vía en esa longitud -que financiará Fomento-, así como el tratamiento complementario que habrá en la zona para la "integración" en el casco urbano -que se sufragará con las plusvalías obtenidas por la urbanización de los terrenos que deje libres Renfe y que están ocupados actualmente por la vía del tren . También se incluirá el acuerdo para la financiación de la nueva estación de Renfe, incluido el aprovechamiento comercial y de ocio deportivo que permitirá el Concello.

El protocolo de intenciones entre las tres administraciones para la solución de los 2,4 kilómetros, se firmó hace casi un año. Posteriormente se celebraron las reuniones entre los técnicos para fijar las cantidades concretas que cada una de las partes debería de aportar.

Fuentes de la Gerencia de Urbanismo indicaron que "hace más de quince días nos avisaron desde Madrid que nos iban a remitir el borrador del convenio, para que le diésemos el visto bueno antes de la firma, pero de momento no hemos recibido nada, y el tiempo pasa".

El convenio a firmar por las tres partes es un elemento esencial para poder realizar el estudio informativo del tramo -sin construirlo no podrán llegar los trenes de alta velocidad a la estación de Vigo-, así como para la redacción de los proyectos constructivos, tanto para la vía, para el entorno urbano y el soterramiento desde la zona de San Lorenzo, y para la estación pasante.

Se da la paradoja de que el Ministerio de Fomento ha anunciado, en varias ocasiones desde que comenzó el año, de que antes de que acabe el presente mes de febrero se someterá a exposición al público la salida sur de la alta velocidad, desde Urzáiz hasta la frontera portuguesa. Algo para lo que el convenio de los 2,4 kilómetros entre Buenos Aires y la estación es fundamental.

La terminal provisional y los talleres de reparación

Los acuerdos a los que llegaron las tres administraciones para la "integración" del tren de alta velocidad en Vigo incluían además -y así deberá recogerse en el convenio que está pendiente de la firma-, las actuaciones complementarias que son precisas mientras duren las obras.

Así, la estación de viajeros, mientras duren las obras para la nueva y las de la vía, se ubicará en la zona de Renfe que está más próxima al puerto, entre Guixar y el Areal. Esto implica que hasta que no esté construida la terminal provisional no podrá dejar de usarse la actual estación ferroviaria.

Del mismo modo, Renfe habrá de trasladar sus talleres de reparación, que actualmente están ubicados en uno de los lados de la estación de Urzáiz, el más próximo a Vía Norte. Los nuevos se situarán en Redondela, una instalación que también será provisional. El recinto de reparaciones definitivo está previsto en la zona de Sárdoma, que no se construirá hasta que esté en marcha la obra para la salida sur.

Todo ello está pendiente de inicio hasta que se firma el convenio ente ministerio, Xunta y Concello. Un documento que supondrá una revolución total en la concepción de las infraestructuras ferroviarias en la ciudad.