El "Angel" del Carnaval, la persona que se deslizó con unas alas blancas, a 90 metros de altura y sujetada a un cable de acero hasta el cercano Palacio Ducal, fue la nadadora campeona olímpica italiana en Atenas 2004 Federica Pellegrini, medalla de plata.

Decenas de miles de personas asistieron al descenso, entre ellos el embajador ruso en Italia, Alexey Peshkov, y Svetlana Medvedeva, una ciudadana rusa que ha organizado uno de los grandes bailes que se celebraran en estas jornadas de carnaval, que se prolongará hasta el 20 de febrero.

A primeras horas de la tarde comenzó el gran desfile de máscaras en la plaza de San Marcos, corazón de la ciudad de los canales, y a media tarde se celebró el Desfile Acuático de los Remeros, en el que participaron 200 remeros en barcas tradicionales vénetas, que desfilaron por el Gran Canal.

Bailes de máscaras, teatros y otros espectáculos se sucedieron en esta jornada del carnaval más famoso de Italia, donde el lujo es uno de los ingredientes fundamentales y que comenzó en realidad -hoy lo fue oficialmente- el pasado día 9 con la "Giornata di Venezia".

Fue una jornada toda veneciana, de acogida de los visitantes, en la que la protagonista fue la "Fiesta de las Marías", una fiesta muy antigua, prohibida y luego recuperada, cuyo origen se desconoce, con la que se conmemoraba, según algunas versiones, la victoria de la población contra unos piratas que secuestraron en el año 943 a un grupo de jóvenes ataviadas por ricos vestidos bordados con oro.

En estos días y en los próximos, no han faltado ni faltarán los pasacalles y conciertos y, como no, el desfile de lánguidas máscaras ricamente ataviadas por las calles y callejas, que dan a este carnaval ese toque decadente, de otros tiempos, que a algunos "transporta" a épocas como las que protagonizaba el mítico libertino Casanova.

Para otros, sin embargo, al carnaval veneciano le falta la vivacidad y alegría de otros carnavales sureños.

Para contentar a todos, el ayuntamiento ha preparado eventos en los que participarán un total de 1.400 artistas, que actuarán en un centenar de espectáculos, la mayor parte en la Plaza de San Marcos.

Un millón cuatrocientos mil euros ha invertido el ayuntamiento en las fiestas.

Uno de los actos que se anuncian como de los más vistosos es el Gran Baile de la Cavalchina, que se celebrará el 17 de febrero en el recuperado -tras quedar destruido por un incendio en 1996- Teatro della Fenice, uno de los templos de la ópera italiana.

La platea, sin asientos, se transformará en una inmensa sala de bailes, en la que los asistentes, vestidos con trajes de los pasados siglos danzarán bailes del siglo XVIII y modernos, a la vez que cómicos, acróbatas y saltimbanquis deleitarán a los presentes.

La representación de comedias de Goldoni no faltarán, así como el espectáculo "El esplendor de Venecia, donde se repasará la historia de la ciudad a través de trajes de las diferentes épocas que le dieron fama y poder.

No faltarán en el desfile las máscaras más famosas de Venecia: Arlequín, Colombina y Polichinella, las más utilizada por los venecianos para cubrir sus rostros en estas fechas y pasear y exhibirse por las callejuelas que dan a los canales, en ese ambiente único y decadente que sabe ofrecer la Serenissima, como todavía se conoce a la ciudad.