Silvia Pampín / A ESTRADA

Por séptimo año consecutivo, la parroquia estradense de San Xurxo de Vea disfrutó en la noche del sábado de una cena de confraternidad con sabor a cocido. Esta tradicional iniciativa, puesta en marcha por la Asociación de Mulleres de San Xurxo de Vea en el año 2000, reunió en el local social de la parroquia a un total de 137 personas, ávidas por disfrutar de una buena gastronomía y de una compañía todavía mejor.

La jornada había comenzado pronto para las organizadoras de la fiesta. Desde las 6.00 hasta las 16.00 horas, dos mujeres de la parroquia se encargaron de elaborar las filloas de filloeiro que por la noche servirían para acompañar el cocido o, aderezadas con miel, como exquisito postre.

Desde las 15.30 horas, otras integrantes del colectivo de mujeres comenzaron a preparar con esmero la materia prima de su tradicional cocido. Hubieron de lavar y escaldar los más de 70 manojos de grelos que este año tanto les costó conseguir, pelaron 60 kilos de patatas y prepararon 15 kilos de costilla, 10 de oreja, 4 de morros de cerdo, 8 de garbanzos, panceta, "cacheira", 100 chorizos y 4 lacones. El esfuerzo mereció la pena. Los comensales dieron buena cuenta de las viandas y, entre bocado y bocado, tuvieron tiempo para confraternizar, contando a sus familiares, vecinos y amigos aquello que el acelerado ritmo cotidiano impide a menudo relatar. Las filloas con miel, las orejas, y una exquisita tarta de manzana obsequio de una cocinera de Pontevedra que siempre acude a la cita pusieron un dulce punto final al ágape, anticipando el Carnaval junto con los disfraces. El evento también contó con la presencia del alcalde y del primer teniente de alcalde de A Estrada, Ramón Campos y José Antonio Maceira. El regidor local pidió a las organizadoras que le sigan invitando cuando deje la Alcaldía.