El futuro colegio Xesús Golmar se reconstruirá en las parcelas traseras -próximas a la ronda este- de su actual emplazamiento, ya que tanto la consellería como el concello apuestan por mantenerlo en su entorno habitual. Esta circunstancia ya está acordada pese que al gobierno local -y también el BNG- proponían construir un tercer colegio en otra parte del casco urbano para desconcentrar los centros. La medida es defendida por el ejecutivo para un nuevo colegio, pero se muestra de acuerdo con la consellería en que el Golmar debe mantenerse en su entorno.

La reconstrucción de este recinto educativo, con casi tres décadas de funcionamiento, conllevará, cuando se acaben las obras, el derribo del actual edificio. Esta circunstancia dotará al colegio público de un patio de grandes dimensiones, ya que dispondría del existente y de la superficie ocupada ahora por el colegio. Por ello, además del nuevo inmueble, también se baraja la habilitación de algún pasadizo de plástico u otro material para que los escolares puedan cruzar todo el patio sin verse muy afectadas por las inclemencias meteorológicas, especialmente la lluvia.

Eso sí, el diseño final del nuevo colegio dependerá del proyecto que la Consellería de Educación anunció el pasado año que iba a comenzar a redactar y del que por el momento, al no haber terrenos, se desconoce su contenido.