La Fiscalía de la Audiencia Nacional elevó ayer de 25 a 29 años de prisión la petición de pena para el etarra Henri Parot, acusado de reintegrarse en ETA y proponer desde la cárcel atentados contra "objetivos vitales" para el Estado, como la Audiencia Nacional, el Ministerio del Interior o el Banco de España.

En el juicio celebrado ayer en este tribunal, el fiscal Ignacio Gordillo modificó sus conclusiones provisionales y acusó a Parot de un delito de integración en organización terrorista "en concepto de dirigente y/o promotor", lo que supone elevar de 10 a 14 años la pena solicitada por este motivo, petición realizada a instancias del fiscal jefe de la Audiencia Nacional Javier Zaragoza.

El fiscal también imputa a Parot -uno de los tres etarras que declarará como testigo en el juicio del 11/M- un delito de proposición para cometer atentados terroristas con resultado de muerte por el que solicita 15 años de cárcel.

Los hechos por los que Parot fue juzgado se refieren a una carta que escribió supuestamente el 1 de junio de 2001 desde la cárcel de Córdoba, cuando ya cumplía condena por pertenencia en organización terrorista y que fue intervenida a la dirección de ETA en septiembre de 2002, en la que proponía "intensificar" las acciones de la banda.

Según explicó Gordillo en su informe final, cuando el acusado fue detenido en abril de 1990 era militante de ETA y la Audiencia Nacional lo condenó como tal, pero ahora -añadió- "ha subido de estatus y es inductor, promotor y dirigente" de la banda.

"Parot asumió nuevas y renovadas funciones de impulso y dirección" en la organización terrorista, continuó el fiscal, que subrayó que el acusado contribuyó "decisivamente" al mantenimiento de la actividad delictiva de ETA con el envío a los responsables que se encontraban en Francia de "instrucciones sobre la estrategia criminal" que debía seguir la banda.