Así lo declaró hoy a Efe Rodrigo Córdoba, presidente del Comité Nacional de Prevención del Tabaquismo (CNPT), integrado por 42 sociedades científicas y asociaciones del ámbito sanitario, tras defender otra subida de impuestos del tabaco.

A su juicio es casi imposible encontrar un local para tomar un café sin humos en numerosos pueblos y barrios urbanos y como se trata de un sector de "mucha visibilidad social", esta circunstancia contribuye a alterar la percepción social sobre el éxito de una norma, cuya aplicación, valorada de forma global, ha sido "muy positiva".

Para Córdoba, la ley ha alcanzado el 80% de sus objetivos sin mayor problema, así el tabaco ha desaparecido de la escena en las empresas, administraciones públicas y centros de transporte por tierra, mar y aire.

Pero sobre este último concretó que 45 de los 47 aeropuertos españoles son sin humo.

Solo en los de Málaga y Madrid se permite fumar, y tienen para ello espacios bien habilitados, excepto en la T4 de Barajas, donde los puntos para fumadores "no cumplen la normativa", ya que no son completamente cerrados, explicó a Efe el presidente de la CNPT.

En cuanto a la publicidad, aseguró que persiste la promoción "subliminal e incentivada" del tabaco en teleseries populares, revistas juveniles y de moda, y otros soporte audiovisuales, y animó al ministerio de Cultura a controlar este extremo.

De entre los resultados positivos destacó que la prevalencia del tabaquismo haya caído un 5 por ciento, lo que supone medio millón de fumadores menos que en el 2005, y que los niveles de nicotina ambientales se hayan reducido en un 83 por ciento en los centros de trabajo.

Pero para el presidente de la CNPT, el Gobierno debe implicarse todavía más y poner en marcha otras medidas que ayuden a la prevención del tabaquismo.

En este sentido defendió que el Ministerio de Hacienda debe atreverse a incrementar el impuesto mínimo del tabaco hasta los 100 euros por cada mil cigarrillos, ahora es de 70, y el impuesto específico hasta los 12 euros, ahora es de 8.