Cómo nos sentimos? Igual que si la acabásemos de enterrar ahora, con la misma pena; no la olvidamos". Estas palabras, pronunciadas por un tío de Sara Alonso, reflejan a la perfección el dolor de las personas que ayer asistieron al funeral por la joven asesinada en Vigo a manos presuntamente de su amigo brasileño. El crimen de esta camarera de 24 años cumple hoy su primer aniversario y en la mente de los que asistieron al acto religioso en su memoria había sobre todo una idea: que se haga justicia.

El funeral, al que acudieron más de medio centenar de personas, tuvo lugar en el concello pontevedrés de As Neves, concretamente en la iglesia parroquial de Liñares, ya que en este lugar fue donde vivió Sara durante varios años con sus abuelos. Entre los asistentes estaban muchas de las personas que colaboraron en la búsqueda de la joven desde su desaparición: su tío José Alonso, su vecina María Santos y amigos de Vigo y de As Neves. Muchos no pudieron contener las lágrimas.

Juicio

El deseo de los allegados de la fallecida es que el juicio contra el presunto autor de la muerte se celebre cuanto antes. "Que caiga sobre él todo el peso de la ley, tiene todos los agravantes del mundo", decía María Santos, algo en lo que coincidía un amigo vigués, Manuel Carballo. "Que se haga justicia", pidió.

Lo que también parecen tener claro familiares y amigos es que todavía hay "cabos sueltos" en esta muerte. "Tiene que haber algún cómplice o algún encubridor; él solo no pudo hacer todo", opinaban ayer a la salida de un emotivo funeral.