El cadáver de un hombre apareció ayer a mediodía flotando en el mar, cerca de un espigón próximo a los Astilleros Barreras, frente a la factoría de Freiremar. Esta persona, que en el momento de su hallazgo carecía de documentación, fue identificada horas más tarde. Se trata de Marco Antonio M.V. , de 42 años de edad, vecino de Vigo. En un principio y según la versión del marinero que lo encontró, se pensó que el cuerpo podría corresponder a un vecino de Bouzas, habitual visitante de la zona portuaria.

El cuerpo, boca abajo, fue localizado sobre las 11,30 horas por el marinero, dueño de una de las chalanas que allí están amarradas, que enseguida dio aviso del suceso.

Efectivos de Protección Civil, ayudados por los bomberos, rescataron del mar el cadáver y sobre las 12,30 horas era depositado en una rampa existente al lado de los astilleros. Antes de ser trasladado a la morgue del "Nicolás Peña" por orden judicial, funcionarios de la Policía Científica y otros del grupo de incidencias de la comisaría levantaron un primer informe sobre el estado del cadáver, que presentaba un golpe en la parte frontal de la cabeza. Se baraja la hipótesis, a expensas de lo que determine la autopsia, de que la víctima pudo sufrir un caída desde un muelle cercano. Marco Antonio estaba vestido y uno de sus zapatos apareció encima de un espigón.