María Luisa Sobrino Manzanares, catedrática de Historia del Arte de la Universidad de Santiago, repasa en el capítulo titulado "Abstracción e renovadores" las décadas entre la finalización de la Guerra Civil (1939) y los ochenta, cuando comienza la democracia en España. Se trata de una época muy compleja y difícil para los artistas gallegos, obligados al exilio ya sea por motivos políticos o porque Galicia carece de una infraestructura cultural mínima. En este sentido, lrecuerda que en el periodo tratado la comunidad no cuenta ni con una facultad de Bellas Artes ni siquiera con galerías de arte.

- ¿Cómo es este periodo desde un punto de vista artístico?

- Muy complejo porque la Guerra Civil dejó un gran vacío y más en Galicia, de por sí ya empobrecida y con falta de comunicación. Es un momento en que el arte gallego se desplaza de Galicia. Muchos, por motivos políticos, optan por el exilio a México y Argentina (Laxeiro, Seoane, Souto...), y otros, los que se iniciaban en ese momento en el arte, se marchan a Madrid. Así, la gran élite artística está fuera de la comunidad, donde no había ni mercado de arte ni dinámica cultural.

- ¿Existen diferencias entre quienes se exiliaron y quienes decidieron permanecer en España?

- Es un problema más generacional. Los del exilio son artistas ya formados en la década de los treinta y que ya habían comenzado su carrera durante la II República. Los otros eran más jóvenes. En Galicia no había facultad de Bellas Artes y por eso se marchan a estudiar a Madrid, donde terminan trabajando, como Tino Grandío o José María Labra.

- ¿Tiene el arte gallego de este periodo algún rasgo distintivo respecto al panorama nacional e internacional?

- En esta época toda España vive un momento de crisis y los artistas intentan salir y contactar con las vanguardias internacionales, aunque el estado no tiene ningún interés por el arte moderno. Sin embargo, sí apoya a Tàpies y a Saura en las bienales internacionales.

- En un contexto tan hermético, ¿cómo se introducen en Galicia los nuevos discursos artísticos?

- Todos están muy pendientes de lo que ocurre fuera. Sólo los artistas españoles más representativos exhiben su obra en Nueva York o San Paulo y son los transmisores para el resto. También los que se exiliaron con sus padres siendo niños, como Jorge Castillo o Nóvoa, vuelven a España y tran consigo ideas nuevas.

- ¿Se podría hablar de características comunes entre los distintos artistas?

- Tal vez alguna relación en cuanto a la temática. Grandío tiene esas neblinas, esos colores grises que se dice que están enraizados con el ámbito gallego; María Antonia Dans... Otros como Labra por ejemplo, no tienen ningún raso específicamente gallego...