El Juzgado Número 2 de Lalín acoge hoy dos juicios rápidos por delitos contra la seguridad del tráfico. El primero de ellos tendrá lugar a las 10.00 horas, contra M.A.A.C., vecino de la capital dezana y detenido el jueves 25 de agosto por conducir en sentido contrario en la AP-53. Tras recorrer seis kilómetros, el detenido empotró el turismo que conducía, un BMW, contra un camión. Aunque ninguno de los dos conductores sufrió heridas, M.A.A.C. abandonó el vehículo, en el kilómetro 39,5 a la altura de Dozón y se marchó a pie. Efectivos de la Guardia Civil detuvieron al conductor después de siete horas de búsqueda.

El segundo juicio que acogen las salas de la capital dezana en el día de hoy se celebrará a las 11.00 horas por una carrera de coches ilegal en la que están implicados M.G.D., de 18 años y vecino de Lalín, y L.D.M., de 20 años y residente en Rodeiro. Según informan fuentes de la Guardia Civil de Pontevedra, ambos jóvenes fueron detenidos a las 15.30 horas del pasado lunes, en la carretera PO-840, que comunica el municipio de Agolada con Betanzos, en las proximidades del límite provincial. Los detenidos se dirigían a una concentración de tunning en Melide y circulaban en paralelo por la calzada con un Volkswagen Golf GTI y un Ford Focus. Tras descubrir que eran perseguidos por la Guardia Civil de Tráfico, ambos coches colisionaron sin producir heridas a sus ocupantes.

Ninguno de los dos jóvenes detenidos tiene antecedentes penales, y se les imputa un delito contra la seguridad del tráfico, por conducción temeraria con peligro para ellos y para otros ocupantes de la vía pública. Las penas que establece el código penal para este tipo de infracciones pueden alcanzar los cuatro años de cárcel y los diez de retirada de permiso, en los casos de mayor gravedad.

Moto con placas de turismo

Por otra parte, efectivos de la Guardia Civil de Tráfico detuvieron a las 16.50 horas del pasado lunes una moto que circulaba con placas de turismo. El menor que conducía el vehículo indicó a los agentes el nombre de la persona que se la había vendido, un vecino de Lalín, J.M.F.F., y al que se le inculpa de un delito de falsedad documental. No se ha producido ninguna detención, por lo que el vendedor de la moto tendrá que esperar a una citación por parte del juez, que decidirá sobre el alcance de su infracción.